Por Dra. Tatiana Terán
Los gangliones son tumefacciones que aparecen en la mano frecuentemente, se localizan por lo general sobre de las articulaciones de muñeca y el recorrido de un tendón, pueden presentarse de diferentes formas y tamaños, que van desde pocos milímetros a varios centímetros. Estos son quistes benignos que en su interior contienen material viscoso derivado del líquido sinovial, que es el lubricante de las articulaciones, por lo que son conocidos también como quistes sinoviales, pudiendo aparecer también en rodillas, pies y codos. Por lo general estos no causan síntomas y el paciente acude a valoración para verificar de que se trata o por razones estéticas, pero no todos los casos son iguales

Se presentan con mayor frecuencia en las mujeres y en edades entre 20 – 50 años , sin embargo pueden aparecer a cualquier edad, ya que estos se ocasionan con los micro desgarros en la capsula y ligamentos que rodean la articulación, dándose perdida de tensión y filtrándose por ahí el liquido sinovial, como cuando uno llena un globo con agua, cuando este aumenta su tamaño es lo que vemos como un bulto bajo la piel, aunque hay algunos que crecen hacia el interior de la articulación ocasionando mucho dolor. Los micro desgarros del tejido articular pueden suceder por diversas causas entre ellas:
- Una hiperlaxitud de los tejidos
- Enfermedades inflamatorias, como la artritis
- Micro traumas repetitivos
- Movimientos constantes de la articulación, los teclados agravan la situación.
- Un trauma indirecto, como estiramientos o hiperextensiones entre otros.
En ocasiones los gangliones pueden desaparecer espontáneamente sin mayor alteración, pero en otras dependiendo de su localización, ocasionan un dolor que puede llegar a ser incapacitante, independientemente del tamaño que notemos a simple vista e igual sucede cuando se encuentran sobre una arteria o nervio en la mano, ya que alteran la función de los mismos
El tratamiento de los quistes sinoviales esta dirigido su eliminación y para eso se cuenta con diferentes opciones tales como: vendajes compresivos, inmovilizaciones, fisioterapia, para tensar el tejido circundante y la aspiración en dependencia del tamaño, aplicando las otras medidas posteriormente.

Cuando los gangliones ocasionan dolor o pueden perjudicar alguna función de la mano, la opción de tratamiento es quirúrgica con la extirpación del quiste y revisión de los tejidos circundantes, utilizando luego una inmovilización parcial por un breve periodo de tiempo, procurando así evitar la reaparición del mismo, dado que estos tienen un pequeño porcentaje de recidiva de un 5-10%, independientemente del cirujano o el tipo de cirugía que se realice.
No se debe tratar de quitar un ganglión golpeándole con un libro u otro objeto contundente, para tratar de «reventarlo», esta leyenda y costumbre común en la población, esto ademas de no ser fiable, puede ocasionar mayores lesiones a la mano, acude al médico correspondiente para una valoración y orientación adecuada. Tus manos son valiosas, cuídalas.
